Desde que la tesis de
maestría del presidente de la República, Pedro Castillo, fue expuesta en los
medios de comunicación, revelando evidentes faltas a la honestidad académica,
las tesis se han convertido en objeto de interés de la prensa y se ha venido opinando
de manera diversa en redes sociales sin tener en claro algunos puntos,
especialmente en relación al Recolector Digital Renati de la Superintendencia
Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu). Uno de esos puntos tiene
que ver con la cantidad de tesis de la Universidad César Vallejo (UCV) en el
ranking de Renati. Por eso, sobre dicha plataforma, es necesario saber lo
siguiente.
Renati
es un recolector. Las tesis de las universidades peruanas
no se publican directamente en dicha plataforma, sino que interopera con los
repositorios institucionales para recoger metadatos, no archivos. Cuando usted
encuentra una tesis de su interés en Renati, no puede descargar allí ningún
documento si corresponde a un repositorio recolectado, sino que le aparece un
registro con un enlace que lo envía al repositorio donde recién puede descargar
el archivo si es de acceso abierto. En ese sentido, un recolector provee un
servicio de centralización de varios repositorios para no tener que buscar en
uno por uno.
No
todas las tesis de las universidades están en Renati.
Este recolector fue lanzado oficialmente desde la publicación de su reglamento
en setiembre de 2016. Desde entonces, las universidades están en la obligación
de subir sus tesis en sus repositorios. Respecto a los años anteriores, no
están en la obligación de subirlas, pues tendrían que digitalizar las tesis
impresas, solicitar a los autores permisos para su publicación y catalogarlas.
Si San Marcos o la PUCP decidieran realizar dicha digitalización desde sus
primeros graduados y titulados a la fecha, tendrían muchísimos más contenidos
en Renati, pero publicarlos no es sencillo. Donde sí se puede tener un número
más claro de la producción de tesis históricas de las universidades es en sus
catálogos de biblioteca.
No
todos los trabajos son tesis. La Ley Universitaria
contempla cuatro modalidades de trabajo conducentes a grados y títulos de
acuerdo al nivel (bachiller, título profesional, título de segunda
especialidad, maestría y doctorado). Dichas modalidades son: tesis, trabajo de
suficiencia profesional, trabajo de investigación y trabajo académico. Por lo
tanto, un estudiante puede culminar la universidad y luego de unos años decidir
titularse con un trabajo de suficiencia profesional cuyo objetivo es demostrar
sus competencias profesionales y no tanto investigativas como con una tesis.
Debido a eso, las universidades no siempre tienen la misma cantidad de trabajos
que egresados en un determinado año, a menos que —y
este parece ser el caso de la UCV—
sea política de la universidad que todos sus egresados terminan con una tesis
lista para sustentar.
Cantidad
no es calidad. El ranking de Renati no es más que un
contador, no mide ningún tipo de calidad pues solo muestra el número de
registros de cada repositorio. Además, se debe tener en cuenta que al ser
Renati un recolector, depende mucho del funcionamiento de los mismos
repositorios. Si estos, por algún descuido o por problemas técnicos no
actualizan sus protocolos, entonces las recolecciones no muestran siempre el
número exacto de trabajo que una universidad tiene en su repositorio. Los que
saben de interoperabilidad tienen claro que los problemas de conexión son pan
de cada día.
Expuesto lo anterior, es bueno tener en claro dichos puntos antes de leer o emitir cualquier opinión en redes sociales. De todos modos, la existencia de los repositorios ayuda mucho a la transparencia y a la honestidad académica, pues cuando se recolectan se hacen visibles situaciones anómalas que nos llevan a preguntarnos qué está pasando.
César Antonio Chumbiauca